¿Qué clase de padre o madre soy?

 Escrito por: Cintia Domínguez 

-Estilos de crianza-


¿Te has preguntado qué tipo de padre o madre eres con tus hijos?

Ninguna institución enseña a ser padres, si no que este rol se aprende a partir del tipo de enseñanza recibida y se caracteriza por el tipo de acciones o correcciones que recibieron los hijos que ahora son padres, de esta forma la familia de origen es el patrón de referencia a la hora de criar a nuestros hijos.

Es importante prestar atención la manera en la que educas a tus hijos, ya que existen diferentes estilos de crianza aun que los hagas involuntariamente.

¿Qué es un estilo de crianza?

Son la forma en que los padres interactúan con sus hijos e hijas, va a ser la base de su desarrollo emocional y social, y, por lo tanto, de su bienestar futuro. Los estilos de crianza van a hacer que el niño o niña se sienta de una determinada manera consigo mismo y con los demás, lo cual es fundamental para su desarrollo.

A continuación, te explicaremos los diferentes estilos de crianza existentes.

Los estilos de crianza están clasificados en 4 categorías

·        Autoritarios: Son padres sumamente demandantes, ya que no permiten tomar a sus hijos sus propias decisiones, obligándolos a hacer exactamente las cosas como ellos se las piden (no hay voz ni voto por parte de los hijos)

     Son progenitores hiper exigentes, no receptivos, y tienen altas expectativas con sus hijos. Imponen un régimen totalitario que se caracteriza por las altas expectativas de cumplimiento de normas familiares y existe poco dialogo entre padres e hijos.

     Son padres con un estilo restrictivo que castigan cuando no se cumple lo que trataron de imponer y esperan que los hijos respeten el trabajo y el esfuerzo que ellos realizan en la crianza.

No facilitan el diálogo y, a veces, lo rechazan como medida disciplinaria. Por ejemplo: “hasta que no hagas lo que te digo, no me vuelvas a dirigir la palabra” y, a menudo, la única explicación que dan es del tipo porque yo lo digo.

Son menos sensibles a las necesidades de sus hijos y tienen más probabilidades de golpear o gritar a un niño en lugar de discutir el problema.

Características en los niños: Estos niños suelen tener baja autoestima. También pueden ser hostiles, agresivos, temerosos, sumisos, irritables, autoexigentes, vulnerables e inseguros.

·        Permisivos: Se trata de padres muy sensibles a las necesidades del niño y sus deseos, se caracterizan por tener pocas expectativas de comportamiento hacia ellos. Es un estilo de crianza en el cual los padres están muy involucrados, pero con escasas exigencias y control sobre la vida de sus hijos. La ausencia de límites impide que los hijos adquieran habilidades de autocontrol.

Los hijos de padres permisivos tienden a ser inmaduros, no controlan sus impulsos ni son socialmente responsables, tienden a ser más impulsivos y en la adolescencia pueden participar más en unas conductas marginales.

Los niños nunca aprenden a controlar su propio comportamiento y siempre esperan salirse con la suya.

Este estilo de crianza genera niños consentidos o niños malcriados que extreman sus conductas si no se hace lo que ellos quieren.

Características en los niños: Por lo general, suelen ser niños rebeldes, dominantes, impulsivos, consentidos, inmaduros, inseguros e inconformistas.

·        Democráticos: Son padres equilibrados y que mantienen una comunicación frecuente y abierta en la que el diálogo es el mejor método para conseguir que los niños mejoren su comprensión.

Son exigentes y receptivos y están centrados en sus hijos. Además, quieren que a través del proceso de crianza se conviertan en autónomos y maduros. También entienden los sentimientos de sus hijos y les enseñan a gestionarlos.

Este tipo de padres, al apoyar la iniciativa personal de los hijos, les permiten que sean ellos mismos quienes resuelvan los problemas que se les presentan en el día a día. Esto conlleva a que la autonomía se afiance.

Cuando colocan una sanción, explican los motivos del castigo que, por lo general, son medidos, nada severos y tampoco arbitrarios, ya que, aunque suelen perdonar, tratan de enseñar en lugar de castigar. 

Proponen normas claras y establecen límites afectivamente. 

Valoran a los hijos y están atentos a sus necesidades y preocupaciones e intereses. Por estas razones, se lo considera el estilo más recomendado.

Características en los niños: Son niños más seguros, confiados, autónomos, curiosos y empáticos. Creen en ellos mismos, pero no subestiman ni compiten con los demás pequeños.

·        Negligentes: Estos padres y madres no son ni exigentes ni flexibles. Son fríos y controladores y no suelen estar involucrados en la vida de sus hijos. De esta manera, no exigen ni establecen límites ni los llevan a la adopción de responsabilidades.


Los padres negligentes suelen omitir las emociones y opiniones de sus hijos y tampoco los respaldan, pero proveen sus necesidades básicas (vivienda, educación, alimentación). A menudo, se encuentran ausentes a nivel emocional y, a veces, incluso físicamente; es decir, aunque estén presentes físicamente no hay comunicación.

No son o no pueden ser sensibles a las necesidades de los niños y no les exigen nada en sus expectativas de comportamiento.

La falta de afecto y consejo en estos niños y adolescentes conlleva efectos muy negativos en su desarrollo. 

Características en los niños: Estos pequeños crecen con la sensación de no ser queridos. Por lo tanto, suelen tener baja autoestima y son inseguros.


Todos los padres quieren lo mejor para sus niños, sin embargo, no es sencillo encontrar un equilibrio entre la sensibilidad y los limites ¿ya detectaste que estilo de crianza empleas a la hora de educar a tus hijos? Esperemos que puedas detectar la forma en la que tratas a tus hijos, y, no se trata de que cargues una bolsa llena de culpas, si no, que puedas ver los beneficios y desventajas de cada método.

Si piensas que eres demasiado exigente o distante puedes ir modificando poco a poco tus conductas por el bienestar de tus hijos.

Y si por el contrario piensas que no pones demasiados limites o reglas puedes empezar a aplicar otros métodos sobre tus hijos que beneficien ambas partes. Si no pasas demasiado tiempo con tus hijos y no les brindas la atención que necesitan, empieza a ofrecerles, amor, tiempo y mucho cariño.

La crianza de los niños no es tarea sencilla, y muchas veces no sabemos cómo encontrar un equilibrio. ¡No te preocupes! Nadie enseña a ser padres, solo identifica tu tipo de crianza y mejora tus conductas y métodos con tus hijos.

 










Comentarios

Entradas populares